Desafíos de comportamiento: Ladridos - ¿Por qué tanto alboroto?
Tu perro ladra para comunicarse, y hay una variedad de razones para ello. Los ladridos sociales, los territoriales, los de búsqueda de atención, los de advertencia y los de solicitud son ejemplos de ladridos que suelen ser arranques cortos y son particulares de un evento u ocurrencia específica. Estos tipos de ladridos habitualmente se detienen una vez que se atienden las necesidades de tu perro. Los ladridos prolongados o excesivos suelen ocurrir cuando no se atienden las razones por las que un perro ladra. Pueden estar pasando por un problema psicológico que requiere una visita al veterinario, o pueden tener un padecimiento médico como pérdida de la audición, pérdida de la vista o movilidad limitada.
La forma en que reaccionamos a nuestros perros cuando ladran también puede alentar o desalentar el comportamiento de ladridos. Es importante entender lo que nuestros perros intentan decirnos cuando ladran y saber qué refuerzos podemos darles para fomentar un comportamiento positivo.
Las principales razones por las que los perros ladran
Ladrido Territorial
Este tiene dos funciones: alertar a los miembros de la familia de que hay un intruso y advertir al intruso que han sido detectados.
Es posible ajustar este tipo de ladrido enseñándole a tu perro una respuesta alternativa, como ir a buscar cierto juguete o acostarse y quedarse en una colchoneta. Practique estas acciones y premie a su perro con un premio cuando realice el comportamiento apropiado. Esta señal se puede simular haciendo que alguien toque el timbre o golpee la puerta, y puede progresar en el uso de la señal en escenarios de la vida real. Tu perro necesitará un poco de entrenamiento e instrucciones las primeras veces en la situación de la vida real. Un miembro que no sea de la familia debe ayudarlo a practicar estos escenarios para que tu perro se acostumbre a las personas que ingresan a la casa.
Ladrido de solicitud
Esta es la forma en que tu perro te dice que quiere algo ahora. Esto puede ser una solicitud para abrir una puerta o ir a algún lugar, una solicitud de atención o comida, o una solicitud para acercarse a otro perro.
Cuando quieren algo, los perros experimentan con varios comportamientos para ver si alguno de ellos funciona. La mayoría de los perros se darán cuenta rápidamente de que los ladridos llaman la atención de sus dueños. Si no te gusta que tu perro ladre, no lo recompenses con atención, abriéndole puertas, sacándolo de su jaula, etc. Incluso decirle a tu perro "para" o "no" puede reforzar el comportamiento no deseado porque de todas formas le estás prestando atención a tu perro y sus ladridos.
En lugar de que tu perro elija cuándo salir, llévalo afuera a intervalos regulares, asegurándote de que no haya ladridos antes de la salida. No dejes que tu perro salga de una jaula hasta que esté tranquilo y ya no ladre. Ignorar a tu perro mientras ladra lo ayudará a dejar el hábito, pero puede llevar un tiempo cambiar su comportamiento si lo recompensaste previamente. Motiva a tu perro a no ladrar dándole un juguete para masticar o un premio cuando esté en silencio.
Ladrido cuando está solo
Es muy común que un perro ladre cuando está solo para intentar que regreses. Esto es común con los perros que nunca se han quedado solos o se quedan solos en entornos desconocidos. Aunque prestar atención a tu perro nuevo o cachorro es perfectamente normal, también es importante enseñarles cómo quedarse solos.
Si tu perro tiene un comportamiento destructivo o se autolesiona cuando lo dejas solo, visita nuestro recurso titulado Ansiedad por separación (Separation Anxiety) y consulta a un conductista profesional.
(Para obtener información sobre conductistas veterinarios, visita dacvb.org. Para obtener información sobre conductistas animales aplicados certificados, visita animalbehavior.org).
Aquí hay algunos consejos y pautas para ayudar a que tu perro aprenda a quedarse solo:
- Practica las "semi ausencias" evitando que tu perro te siga de habitación en habitación cuando estás en casa. Intenta restringir a tu perro en una habitación diferente usando una puerta para bebés, una jaula o cerrando la puerta. Asegúrate de ignorar cualquier ladrido, abstenerte de hacer contacto visual, hablar con tu perro o regañarlo. Al contrario, refuerza tu ausencia regresando con frecuencia a la habitación y dejando premios de alto valor como pollo, queso, etc., mientras están en silencio.
- Sal y regresa con frecuencia de casa. Recuerda ignorar a tu perro cuando esté ladrando. Espera hasta que estén en silencio durante al menos 30 segundos, para que no te arriesgues a recompensar el ruido.
Ladridos espeluznantes
Cuando algo en un entorno hace que un perro se sienta incómodo, es posible que esté ladrando para decir: "¡Soy peligroso!" o "¡No te acerques más!"
Este puede ser el caso cuando los cachorros no están socializados adecuadamente (properly socialized). Debes exponer a tu perro a muchos lugares, experiencias, vistas y sonidos; y haz que todo sea lo más divertido posible con elogios, juegos y premios. Si no tuviste a tu perro de cachorro, aún puedes recuperar el entrenamiento y la socialización con tu perro adolescente o adulto. Trata de aislar lo que podría estar causando esta reacción de miedo y asociarlo con algo positivo, como comida y premios. Si estás tratando de crear estas asociaciones positivas sobre lo que está causando la reacción de miedo en un perro adulto, recuerda que le llevará tiempo sentirse cómodo con las nuevas situaciones.
Ladridos de aburrimiento
Esto puede suceder cuando tu perro no recibe su mínimo diario de ejercicio, estimulación mental y estimulación social. Básicamente, tu perro está aburrido y está tratando de decírtelo. Intenta designar tiempo suficiente para asegurarte de que tu perro tenga una dosis diaria de atención y estimulación, y siempre te recompensará con una compañía amorosa.
Consejos para prevenir los ladridos excesivos de perros
- Los perros son una especie muy social y prefieren la compañía en lugar de largos períodos de aislamiento. Considera tener dos o más perros, llevar a tu perro a la guardería para perros o tener un paseador de perros a la hora del almuerzo si trabajas todo el día.
- Mientras estás en casa, aumenta la cantidad de estimulación física y mental para tu perro. ¡En la naturaleza, los animales están acostumbrados a gastar grandes cantidades de energía para rastrear y cazar su comida! Recuerda ejercitar a tu perro y estimularlo con juegos y juguetes.
- Si sabes que te irás por mucho tiempo, intenta cansar a su perro con anticipación. Una caminata alrededor de la cuadra no será suficiente como ejercicio para algunos perros. Considera agregar algunos juegos de alta intensidad a la rutina de su perro, como buscar, tira y afloja y jugar al escondite, así como citas para jugar con otros perros.
- También puedes estimular a tu perro durante las comidas. Puedes esconder premios en la casa, esparcirlas en tu jardín o esconderlas en un hueso hueco o en un juguete Kong. También puedes usar este tiempo y comida para trabajar en modales básicos o enseñarle a tu cachorro algunos trucos nuevos y divertidos.
- Puedes ser tan imaginativo como quieras con el entrenamiento para evitar que tu perro esté poco estimulado.
- Los juguetes también son una herramienta maravillosa para mantener ocupado a tu perro mientras estás fuera.
- Agrega juguetes a su tiempo de juego para ayudar a mantener a tu perro interesado en ellos.
- Puedes enseñarle a tu perro a encontrar un juguete que hayas escondido en la habitación y luego celebrarlo con tira y afloja o buscarlo.
- También puedes animar a tu perro a que te traiga un juguete cuando llegues a casa y premiarlo con un juego.
- Asegúrate de que tu perro tenga juguetes para mantenerlo estimulado mientras estás fuera.